La Gusana Ciega conquista a las distintas generaciones

la gusana

Roberto Arturo / @ramcbot

Son las 9 de la noche. Las puertas del Beat 803 se abren, y un grupo de personas corre para conseguir un lugar de pie frente al escenario. Rápidamente compran cervezas, al tiempo que preparan sus celulares y comienzan a silbar para demandar el inicio del concierto. A su tiempo, otro grupo se reúne detrás de los primeros. Toman su lugar en las mesas y ordenan su cena. Parejas, en su mayoría, esperan con paciencia los primeros acordes. Por una hora se repite la dinámica, mientras una pantalla cubre el escenario.

El rock es el género que mejor une a las distintas generaciones, y los integrantes de La Gusana Ciega lo saben. Desde Merlina, su primera producción discográfica, han creado himnos dedicados al desamor, a la melancolía y a la sorpresa. En la rueda de prensa previa a su concierto, ellos afirmaban no tener un secreto para mantenerse en el gusto de la gente. La clave ha sido experimentar.

Su más reciente producción, Borregos en la Niebla I, es un EP de tan sólo cinco canciones. Daniel Gutiérrez, vocalista de la banda, explicaba que fue en respuesta a los gustos de las nuevas generaciones. “En discos más largos corres el riesgo de que se pierdan buenas canciones”, destacó.

La pantalla-telón se alza, Sexy Rotten sube al escenario y el público recibe con aplausos a la banda de apertura. Por media hora prenden a los asistentes con sonidos que recuerdan a ese rock tan característico de los 90.

Llega el turno de La Gusana Ciega. Al igual que en las demás sedes del Circuito Indio, el recinto facilita la intimidad entre el público y la banda. “¡Toca Celofán! ¡1987! ¡Mejor Más grandes!”. Una a una, las peticiones del público son respondidas. La banda no toma pausas entre canciones. Los espectadores, sin distinción, no paran de vitorear a los intérpretes.

Hacia el fondo, un asistente reconoce que personas de cualquier edad pueden identificarse con los distintos temas. Resulta difícil debatirle. Tornasol recuerda a ese amor que resultó no ser tan perfecto como creíamos. Ejército de Hormigas fue escrito en respuesta al bullying recibido de niño. Al sonar San Miguel, los espectadores recuerdan en silencio promesas de amor no cumplidas.

Tras interpretar Ella Estrella, una de las que canciones más solicitadas, la banda se retira del escenario. No obstante, el clamor de la concurrencia los haría volver. Con Yes sir, I can Boogie, La Gusana Ciega despide entre bailes y gritos a quienes fueron testigos por más de dos horas de una de las bandas mexicanas más influyentes de los últimos veinte años.

Fotografía La Gusana Ciega

También te pueden interesar...

0 0 votos
Article Rating
Suscríbete
Notifícame de
guest
0 Comments
Inline Feedbacks
Ver todos lso comentarios
0
Would love your thoughts, please comment.x
()
x

¡Únete a la #ManadaManatí! Compártenos tu correo y pronto recibirás sorpresas. 

Newsletter