Peña Nieto sólo alcanzó a declarar los lugares comunes de siempre. Afirmó que una frontera segura “es de vital importancia para México y Estados Unidos”,
Vivir como servidor, es igual a experimentar al amor de una manera superior, cuando para ser el primero se es el último y el servidor de todos voluntariamente, cuando se piensa en las necesidades de otros, se ayuda, se tiende la mano, se escucha, se consuela al afligido, se brinda apoyo a quien viene detrás, cuando se enseña a otros lo que hemos aprendido, se les impulsa a crecer
Contra el discurso retrogrado de “lo natural”, nuestra más intima y trascendente esperanza de que la única naturaleza humana es la solidaridad, amorosa y plural.