JESSICA BADILLO | @MasQueUnaHincha
A dos jornadas de la Liga MX Femenil el regreso de Norma Palafox ha dado de que hablar por diversas razones.
Me gustaría que este espacio fuera para destacar su desempeño futbolístico que, hasta el momento no ha decepcionado, pero sigue un poco lejos de lo que fue en su primer año en la liga.
Tristemente tengo que denunciar de nuevo el acoso que hay en nuestra liga y en nuestro futbol en general. También es importante señalar las publicaciones de medios “serios” y perfiles de redes sociales en los que resaltan su físico más allá de su forma de jugar o el hecho de que para haber dejado de tener actividad futbolística durante 6 meses, Norma juega y compite.
Ojalá alguien hubiera hablado de eso, pero todos se limitaron a subir fotos de ella y hacer comentarios irrespetuosos, situación que ha sido constante desde hace varias semanas.
Aprendamos juntos un término que vamos a usar muchas veces para denunciar una conducta que no debería de existir en el futbol femenil: sexualizar, que básicamente es dar carácter o significado sexual a algo. En otras palabras, eso que están haciendo con Norma y que repiten con varias jugadoras de esta y cualquier otra liga femenil. Pasó durante el mundial y ha estado pasando desde que inició la Liga MX Femenil.
Norma no es la única, apenas salió la noticia de que Juárez había fichado a Karen González y los comentarios no se hicieron esperar, así como las publicaciones donde sexualizan a una menor de 17 años y la reducen a su físico.
Lo mismo sucedió con Jana Gutiérrez, quien se llenó de “felicitaciones” en su cumpleaños 18, las cuales en realidad eran un reflejo de la forma en la que los medios de comunicación ven a las jugadoras.
¿Qué leemos de estas situaciones? Que los medios retoman la Liga MX Femenil cuando hay polémica o cuando hay que sexualizar a una jugadora. Que cuando pedimos respeto, somos recibidas con el mismo discurso de siempre y que nos falta mucho para ser una afición digna del futbol femenil.
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