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El uso de 4 mil 223.9 millones de pesos que serían empleados para la reconstrucción de cientos de templos afectados por los sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017 es incierto, debido a la opacidad con la que se ejecutaron y distintas denuncias de corrupción realizadas por exfuncionarios.
De acuerdo con una investigación realizada por Puebla Contra la Corrupción y la Impunidad (PCCI), sólo uno de cada cuatro de los 134 monumentos severamente afectados ha sido reconstruido, mientras que sólo la mitad de los 325 inmuebles con daños moderados ya han sido reparados.
La destrucción de los sismos acontecidos hace más de dos años y medio fue larga: 621 inmuebles afectados, al menos 134 de ellos con daño severo, 335 con daño moderado y 161 con daños menores.
Los recursos de la reconstrucción suman 4 mil 223.9 millones de pesos, entre un seguro contratado con BANORTE por 2 mil 377.7 millones de pesos, y aportaciones del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN) por mil 846.1 millones de pesos.
Sin embargo, “no existe una idea clara de cuántos templos se han recuperado, de dónde han salido los recursos y cuánto dinero se ha gastado en ello”, según la organización.
Mientras el Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Puebla afirmó en febrero de este año que se habían aprobado 515.1 millones de pesos, la Secretaría de Cultura del gobierno federal aseguró un mes después que los recursos no eran superiores a los 103.1 millones de pesos.
“En una misma fecha, 26 de febrero, el Centro INAH Puebla habla en distintos oficios de 248 y 260 inmuebles reparados, y dos días antes, el 24 de febrero, el Coordinador Nacional de Centros INAH planta el número de monumentos reparados al cien por ciento en 286”, precisa PCCI al exhibir las contradicciones.
El pasado 16 de junio, mientras tanto, el director del INAH, Diego Prieto, afirmó que “son más de 300” los monumentos reparados, y dos días más tarde el nuevo delegado del INAH en Puebla, Manuel Villarruel Vázquez, afirmó que ya eran 325.
En medio de estas contradicciones, el anterior delegado del INAH en Puebla, Ambrosio Guzmán Álvarez, denunció en una carta dirigida a la Presidencia de la República un conjunto de actos de corrupción y malversación de fondos de los recursos empleados para la reconstrucción.
A la fecha, sin embargo, no existe certeza de que estas denuncias son investigadas por la Secretaría de la Función Pública (SFP) o las instancias de procuración de justicia.
En el siguiente enlace podrás leer la investigación completa realizada por Puebla Contra la Corrupción y la Impunidad, titulada Sismos, opacidad y corrupción en la reconstrucción de los templos poblanos.
