El voto de las personas que se encuentran en las cárceles de Puebla fue posible debido a que están en prisión preventiva.
ENRIQUE REYERO | @reyeroe
En Puebla se aplicó una prueba piloto para que personas privadas de su libertad puedan ejercer su derecho al voto.
Durante las elecciones celebradas el domingo 6 de junio, 15 presos poblanos en prisión preventiva participaron en esta prueba piloto. Las 15 personas se encontraban en 7 distritos electorales diferentes.
“Esta es una prueba piloto que realiza el INE por primera vez, para garantizar el derecho al voto de todas las personas que están en prisión preventiva”, explicó Wendy Osuna Rivera, vocal de capacitación electoral del INE.
La Junta local ejecutiva del INE Puebla recibió y contó los votos en una mesa diferente a las instaladas en todo el estado. La votación no se recibió de manera propia, sino que esta consistió en una mesa de escrutinio y cómputo directo, conformada por la presidenta, secretaria y dos escrutadores.
El voto de las personas privadas de su libertad es posible debido a que la prisión preventiva no elimina su presunción de inocencia en tanto no sean declaradas culpables o inocentes de los delitos por los cuales fueron detenidas.
Quizá te interese: Voces de mujeres en la cárcel más grande de Puebla
Esto implica que sus derechos políticos deberían estar intactos, como ocurre en otros países, tales como Argentina, Costa Rica, Colombia, España o Canadá
En México, cuatro de cada 10 personas privadas de su libertad no han recibido sentencia, según el Inegi, pero esta proporción es más alta en algunos estados. En Puebla, por ejemplo, dos de cada tres reclusas se encuentran en prisión preventiva, sin sentencia.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) se manifestó a favor de la primera prueba piloto, pues es clave para reconocer a las personas privadas de la libertad como parte de la sociedad, independientemente de su situación jurídica.
A través de un comunicado, la CNDH añadió que la base medular de la prisión es la reinserción social y, por lo tanto, el derecho al voto es una manera tangible de lograr un sentido de pertenencia y de responsabilidad con la sociedad.