Ser mujer y atleta ha llevado a estas deportistas a identificar las barreras a las que se enfrentan en sus carreras en el Foro “¿Nos Topan?” , donde abordaron temas como la falta de promoción y apoyo mediático, la diversificación de deportes y los retos como mujeres en la actividad deportiva
MARIO PASTEN | @MARIOPASTENAVE
Ser mujer y deportista es un reto, si a esto se suma una discapacidad, las barreras para que las atletas obtengan el reconocimiento a su esfuerzo, crecen.
En el foro organizado por Fucho Para Ciegos llamado “¿Nos Topas?”, llevado a cabo el viernes 18 de marzo, se creó un espacio donde dos mujeres atletas con discapacidad compartieron sus experiencias de cómo el deporte las ha motivado en la vida en general y a superar barreras que tanto ellas como la sociedad se impusieron desde muy temprana edad.
En el foro participaron Ángeles Ortiz, jugadora de Topas, el primer equipo femenil de futbol 5 para mujeres ciegas o con baja visión en el país, y Diana Coraza, atleta paralímpica poblana que ha participó en los últimos juegos de Tokio celebrados en septiembre de 2021.
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También participó Silvana Leiva, comunicóloga argentina, encargada de la parte de investigación en Somos Versus, una ONG que se dedica a combatir la discriminación de género, clase y raza con el fin de mejorar contenidos en periodismo deportivo.
Una oportunidad
En este foro, Ángeles compartió cómo después de perder la vista, pensó que nunca iba a jugar más futbol hasta que se enteró que en Puebla existía una posibilidad de volver a practicar el deporte que tanto le gustó.
A la actual jugadora de Topas Femenil le regresaron las ganas de volver a hacer actividades dentro y fuera de la cancha, actualmente lleva alrededor de cinco años en el equipo.
Falta apoyo
La historia de Diana fue diferente, ella practicaba atletismo desde los siete años, cuando perdió la vista, Coraza encontró el para atletismo, y ha sido partícipe de competencias mundiales y olímpicas durante su corta, pero muy galardonada carrera.
En el foro abordaron la poca visibilidad a otros deportes, ya que el centro de atención se dirige al futbol, a pesar de que las y los atletas han tenido desempeños destacables en otras disciplinas.
Para Diana todos los atletas necesitan la difusión necesaria por la calidad de éstos, y que el deporte para ciegos no se debe enfocar solamente en futbol si no en otras disciplinas.
Ángeles coincide en que hace falta difusión, así como seguimiento de los medios y apoyo por parte de los mismos, de repente salen noticias de atletas en particular, pero no le dan el seguimiento necesario en su proceso deportivo, cosa que le podría abrir espacio a muchos tipos de apoyo que alguien podría recibir.
Para ella es evidente que se inclina mucho más al deporte masculino en todos los aspectos, incluso en el fucho para ciegos. A nivel nacional, ya existe una liga de futbol para ciegos o débiles visuales, mientras que, del lado femenil, solo existen dos equipos, uno en Jalisco y las Topas Puebla.
Se sigue minimizando la participación de las mujeres
Silvana opinó que esa es solo una de las miles de barreras que el deporte femenino debe de romper. Para muchas disciplinas, la presencia de la mujer sigue siendo un tanto incómodo para el espectador, a pesar de que ahora ellas pueden practicar el deporte que quieran, temas como la brecha salarial, y los lugares que la sociedad ha moldeado para ellas, provoca que no haya equidad.
En los deportes “rudos” como el boxeo las Artes Marciales Mixtas o el futbol americano y el rugby –agregó– se ve de una manera extraña e incómoda que una mujer lo practique, así sea “la mejor atleta del mundo”.
Concluyeron que los espacios de convivencia son muy importantes, ellas se sienten mucho más cómodas y seguras en un lugar donde hay puras mujeres.
Es decir, existe un mejor ambiente e incluso prefieren que una mujer las esté entrenando, en lugar de que un entrenador hombre les grite y las menosprecie en su trabajo, como les ha sucedido.