¿Qué estabas haciendo hace siete años? Parece una pregunta de la sección de recuerdos de Facebook, pero no te preocupes, que no queremos hablar de tu ex. La pregunta viene al caso porque hace siete años nosotrxs dábamos los primeros clics al botón de publicar en este sitio.
En este tiempo hemos cambiado muchísimo y, como es obvio, también Manatí ha mudado varias veces de piel. Del blog a la radio por internet, de la radio por internet al portal, y del portal al medio de comunicación. Todo eso nos ha pasado en siete años.
Sie-te-a-ños.
Pero ¿tiene sentido? Es decir, ¿aún tiene sentido hacer periodismo? ¿Tiene futuro mantener y alimentar un medio independiente en Puebla?
Cualquier periodista dirá que mirar, explicar, contar, señalar e investigar son los verbos con los que trabaja el periodismo; pero cualquier otro periodista que haya trabajado en un medio independiente añadirá que también lo son sobrevivir, resistir, dudar, aguantar y, a veces, pausar, incluso desistir.
Hace unos años decidimos que Manatí sería el medio en el que nunca pudimos trabajar. Un lugar que no estuviera controlado por el dinero del político en turno, o del empresario que lo heredó todo.
Un medio con perspectiva de derechos humanos que fuera útil a las personas. Un lugar que pusiera la mirada allí donde los demás no quieren mirar; que pusiera el oído ahí donde se pretende silenciar.
Y, con ese objetivo, durante este lapso hemos compartido espacios con medios a los que admiramos; hemos recibido premios municipales y estatales; hemos publicado muchos, muchos reportajes; hemos vendido camisetas y stickers, y, hay que decirlo, también hemos tenido uno o dos trabajos más.
Todo cuanto hemos hecho ha sido con el fin de informar. Es verdad que cuando investigamos un tema usualmente éste surge para saciar una curiosidad personal. Pero ¿qué sentido tendría saberlo y ya? Lo que realmente nos importa es poder contárselo a ustedes.
Miramos con gracia –en realidad no es gracia, es otra cosa– esas cartas editoriales que algunos medios publican en sus aniversarios. En esos textos, los directores editoriales suelen hablar de supuestos impactos, alcances y métricas, como si no supiéramos que la cifra del convenio es su única medida del éxito.
A nosotrxs nos interesa saber cuántas personas nos leen, claro. Pero hemos aprendido que la estadística y el impacto van más allá de lo que arroja el Analytics.
Nos emociona, por ejemplo, cuando alguien ha escrito algo radiante y quiere publicarlo aquí, en este medio que lleva por nombre a un mamífero acuático.
Nos emociona, por ejemplo, cuando las personas nos buscan específicamente a nosotrxs para contar sus historias, sean de denuncia, hartazgo o felicidad.
Nos emociona, por ejemplo, cuando un extraño en una fiesta nos dice que le gusta mucho Manatí.
Nos emociona, por ejemplo, cuando nos enteramos que nuestro trabajo ha servido para cambiar algo, o para ser el comienzo de algo.
¿Tiene sentido? ¿Tiene sentido hacer periodismo independiente en Puebla? Sí, lo tiene, mientras todas estas cosas nos sigan emocionando,
Cada aniversario en Manatí ha sido distinto. Estos siete años nos toman un poco más desencantadxs, pero también con más aprendizajes y experiencias. Queremos seguir contando las historias que nos importan tanto como a ustedes.
Para saber qué otras cosas les gustarían leer –o escuchar o mirar– en este medio, durante las siguientes semanas vamos a levantar una encuesta bastante práctica. Si nos ayudan a contestarla, vamos a tener más herramientas para seguir siendo lo que somos (da clic aquí si quieres responderla de una vez).
Y nosotros somos lo que contamos.
Guadalupe Juárez
Carlos Galeana
Mario Galeana
manatí años manatí años manatí años