El proyecto que se realizará en el Atoyac será similar al aplicado en el río Sonora, donde se analizan caso por caso las afectaciones de la población por contaminación ambiental para dar atención especializada.
SAMANTHA PÁEZ | @Samantras
En la cuenca del río Atoyac, en las colindancias de Puebla y Tlaxcala, existe 200 veces más probabilidad de enfermar de cáncer que en el resto de México, es por ello que la Secretaría de Salud federal implementará allí un plan estratégico permanente para identificar y atender cada uno de los casos de enfermedades por contaminación ambiental.
Así lo anunció Gabriela Domínguez Cortinas, del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece), durante el Foro Regional sobre la Cuenca del Alto Atoyac, desarrollado del 13 al 15 de octubre en la Universidad Autónoma de Tlaxcala.
Durante una entrevista, Domínguez Cortinas explicó la cuenca del Atoyac–Zahuapan es considerada una Región de Emergencia Sanitaria y Ambiental (RESA) y es por ello que se realizará censo para conocer la población expuesta a los riesgos sanitarios por contaminación, para después conformar los diagnósticos y canalizar con los especialistas que cada persona necesite.
El modelo de atención que está desarrollando el Cenaprece y que se aplicará en siete RESA consiste en:
🔵 Priorizar municipios para la búsqueda e identificación de enfermedades asociadas a procesos contaminantes.
🔵 Capacitar a promotores de salud para buscar casos activos casa por casa.
🔵 Censar casa por casa a los integrantes para identificar a población con sintomatología asociada a los contaminantes o con diagnósticos ya establecidos.
🔵 Generar expedientes o cédulas familiares para canalizar a los niveles de atención que cada persona requiera.
🔵 Capacitar a personal médico de la zona para que identifiquen a personas con síntomas o signos de exposición crónica a ciertos contaminantes y entonces empezar les den seguimiento y les canalicen.
🔵 Alimentar un sistema de vigilancia para garantizar los recursos necesarios para mantener el programa.
🔵 Localizar zonas donde no haya cobertura sanitaria, para conectar a las personas afectadas con las zonas donde sí haya cobertura.
🔎Avances en la detección de casos🔍
De acuerdo con Alejandra Méndez, directora del Centro Fray Julián Garcés de Derechos Humanos y Desarrollo Local, datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) arrojan que en la cuenca del Atoyac–Zahuapan entre 2015 y 2019 unas 11 mil 343 personas murieron por causa de tumores, esto significaría que existe hasta 200 veces más de probabilidad de enfermar y morir de cáncer en la zona que en el resto del país.
Asimismo, Alejandra apunó que varios estudios indican que el 71% de la población vecina de la cuenca —que ronda los 3.5 millones de habitantes— tiene un mayor daño genotóxico que en la Ciudad de México, debido a la contaminación industrial que existe en la zona.
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La implementación del plan estratégico del Cenaprece en la cuenca del Atoyac, según indicó Gabriela Domínguez, se encuentra en la priorización – junto con organizaciones de la sociedad civil y especialistas- de 10 municipios en Tlaxcala y la ubicación de las diferentes localidades donde se iniciará la búsqueda activa de casos.
De las RESA es la de Canenea-río Sonora donde hay un mayor avance, comentó la representante de Salud federal, pues ya se pasaron las fases de búsqueda de casos para detectar metales pesados en la población expuesta, también se capacitó al personal médico, de enfermería, nutrición y psicología. En este momento están dando atención prioritaria a 700 personas y generando su historial clínico toxicológico, para pasar a la categorización y canalización con especialistas.
En un informe de mayo de 2022 de los Comités de cuenca del río Sonora, había 625 personas con análisis toxicológicos en los municipios afectados por el derrame tóxico de Grupo México y para esa fecha faltaban otras 890 personas que aún no contaban con los análisis toxicológicos. Estos estudios habrían arrojado que de las muestras tomadas había alta presencia de arsénico, plomo y cadmio en la orina de las personas, plomo, manganeso y cadmio en la sangre.
Gabriela Domínguez dijo que en río Sonora a la par se está trabajando con la vinculación con IMSS bienestar e Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), para que los procesos de canalización no sean burocráticos, sino que sean continuos y vayan registrados en un sistema de vigilancia.
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