La detención de un pintor que poseía de forma ilegal un mono araña que aparentemente pretendía vender en pleno Zócalo de Puebla es acaso la punta del iceberg del tráfico de cientos de animales silvestres que ocurre anualmente en el estado.
GUADALUPE JUÁREZ | @lupjmendez *
Un hombre con 12 bolsas de plástico con un ajolote nadando en cada una, tucanes muertos por doquier, animales rescatados de un circo, un sujeto vendiendo un coyote y aves rescatadas de un mercado. Esas son las escenas que el tráfico de animales en Puebla ha arrojado en los últimos tres años.
El antecedente más reciente fue la detención del pintor Esteban Fuentes de María, registrada el jueves 30 de diciembre en el Centro Histórico de la capital del estado, acusado de intentar vender un mono araña, por lo que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) lo denunció por la posesión ilícita del animal.
El artista —un pintor asociado al morenovallismo, que detentó el poder en Puebla durante casi una década— salió libre al entregar el mono a las autoridades, pero aún con la acusación en su contra.
Entre 2019 y 2020, los casos registrados por la Profepa consistieron en reportes de animales en circos o ferias, un tucán enjaulado en la colonia Hacienda Puebla y cuatro tucanes muertos, tres en el bulevar La Pedrera y uno en San Felipe Hueyotlipan, sin que hubiera detenidos.
En abril del 2020, la Secretaría de Seguridad Pública encontró 250 aves en un operativo en el mercado La Acocota. En su comunicado oficial, la dependencia indicó que “algunas” eran especies protegidas.
El 18 de agosto, en un operativo en el segundo piso de la autopista Puebla-México, dos hombres fueron detenidos por llevar 100 loros cucha, 20 loros cabeza roja, cinco loros cabeza amarilla y dos monos saraguatos.
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En 2021, un año después del inicio de la pandemia por COVID-19, comenzaron a registrarse más detenciones, como la de un hombre que fue detenido el 12 de enero por poseer un tigre en Acatzingo.
El 14 de abril, una mujer fue detenida al ser señalada de vender aves cernícalas por mil 500 pesos, mismas que traía desde Tabasco.
En mayo del año pasado también la SSP detuvo a un hombre que vendía a un coyote en el estacionamiento de la plaza Cruz del Sur.
El 16 de abril en Santa María La Rivera detuvo a dos personas señaladas como traficantes al tener en sus manos una tortuga, un lagarto y una ardilla cola roja. De acuerdo con el reporte de la policía estatal, los dos hombres pretendían vender las especies en redes sociales por 3 mil 600 pesos.
Incrementa tráfico de animales en pandemia
El presidente de la Asociación de Zoológicos Criaderos y Acuarios de México, Ernesto Zazueta, denunció que el tráfico de animales incrementó 660% durante el primer año de la pandemia, debido al difícil entorno económico.
Esto, pues las personas que viven cerca de parques nacionales o refugios de animales han tenido que recurrir a la venta de especies para subsistir, según remarca un informe de Iniciativa Global contra la Delincuencia Organizada Trasnacional.
El informe mundial sobre los delitos contra la vida silvestre y los bosques 2020 de la oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) alerta que al separar a los animales salvajes de su hábitat natural incrementan el potencial de transmisión de enfermedades zoonóticas, aquellas causadas por patógenos que se propagan de animales a humanos.
En el mundo identifican a por lo menos 150 nacionalidades traficantes de especies, que tejen redes de delincuencia trasnacional, lo cual se ha fortalecido con el comercio en línea.
*Con información de Paola Mancilla
