Después de recibir un diagnóstico de la Ibero Puebla, el delegado del Instituto Nacional de Migración (INM) en Puebla, David Méndez, afirmó que revisarán que se garanticen los derechos humanos de los migrantes
STAFF MANATÍ | @manatimx
Los protocolos de actuación de “rescate” y detención de migrantes serán revisados para mejorarlos y garantizar los derechos humanos de los extranjeros que cruzan el estado, afirmó el delegado en Puebla del Instituto Nacional de Migración (INM), David Méndez Márquez.
“Nosotros tenemos ese compromiso de ir a acreditar que los protocolos se cumplen y creo que en esos sentido nos sirve de mucho como parámetro para establecer rutas para mejorar”, señaló en conferencia de prensa.
Además, aseveró que las personas que no respeten el protocolo establecido podrán ser sancionadas por los mecanismos de control interno, el cual puede someterlos a una investigación.
Esto, como parte de las observaciones que hizo un grupo de académicos y alumnos del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría (Idhie) de la Ibero Puebla en el informe “Vidas en contención: privación de la libertad y violaciones a derechos humanos en estaciones migratorias de Puebla y Tlaxcala, 2020-2021”.
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En el informe se recogen historias de abuso y discriminación, a partir de 45 encuestas realizadas en estaciones migratorias. Entre las vejaciones se encuentran arrestos con violencia, no les proporcionan atención médica ni les dan acceso a sus medicamentos.
Además de la separación de familias, poco acceso a abogados particulares y escasa información sobre su situación migratoria, son parte de las cosas que enfrentan los migrantes al ser detenidos.
Siguen operativos para evitar tráfico de personas
El delegado del INM afirmó que entre las labores de inteligencia han detectado casas que son utilizadas para resguardar a migrantes que por lo regular son posibles víctimas de tráfico de personas. Dichos puntos se ubican en todo el estado, pero sobre todo en el centro de Puebla, aseguró.
En este sentido, informó que detuvieron a 109 migrantes en Acajete, Puebla, de nacionalidad cubana, guatemalteca, hondureña y nicaragüense, quienes viajaban en un autobús desde Veracruz con destino a Ciudad de México.
Mientras los migrantes fueron llevados a la estación migratoria, una persona de nacionalidad mexicana fue detenida por presunto tráfico de personas.