En un trabajo conjunto entre organizaciones de la sociedad civil y la comunidad estudiantil de la primaria Xicoténcatl, esta exposición reúne las memorias de los habitantes de la comunidad de San Rafael Tenanyecac que vio de cerca el pasado del río Atoyac
PALOMA FERNÁNDEZ | @palomapen
Con el fin de organizar y sensibilizar a la comunidad poblana y tlaxcalteca, la Red de Comunidad, Ciencia y Educación, y la escuela primaria Xicoténcatl, realizaron el museo memorial “Las voces del Atoyac”.
Esta red está conformada por instituciones académicas y sociales como la Universidad de Bristol, Centro Fray Julián Garcés, la Coordinadora por Un Atoyac con Vida, el Centro de Investigación y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional y la UNAM.
Preocupados por el deterioro de este importante y milenario cuerpo de agua que atraviesa localidades de Puebla y Tlaxcala, reunieron a las voces de quienes vieron su deterioro consecuencia del crecimiento industrial de los años 60 y 70.
“El propósito es que los niños y las niñas que ya conocieron estos lugares contaminados sepan que hubo vida y tengan esperanza de que se puedan modificar”, comentó Alejandra Serrano, la directora del Centro Fray Julián Garcés.
La exposición en video se divide en tres partes, que representan el pasado, presente y futuro del Río Atoyac. La primera es la mirada al pasado del río Atoyac, contado desde las personas que lo vivieron.
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Esta parte es explicada por una de las mujeres de la localidad y comprende la memoria de las comunidades con el río, desde los usos cotidianos que le daban, hasta leyendas como la de Reina Xóchitl, una mujer que se convierte en serpiente.
La devastación de la contaminación del río gracias a los corredores industriales que le colindan es lo que se puede ver en una segunda parte, que en palabras de una de las mujeres de la comunidad que expuso esta sección, lo que antes era un río para nadar, beber o bañarse, ahora emana un olor insoportable que hace arder los ojos.
“Que los niños sean defensores, no depredadores, porque realmente la generación se está perdiendo. Ahora ya no podemos salir al campo, no podemos disfrutar de un río, ahora sólo hay tanta violencia. Estamos viendo qué nos trajo la industria, toda esta devastación, esto es lo que nos trajo el progreso, ¿qué nos trajo? Muerte, nos está matando todo esto”, cuenta la mujer de edad avanzada que ve una esperanza en rememorar y recuperar el río.
El último fragmento de esta exposición titulado “el derecho de la infancia a un medio ambiente sano”, derechos de las infancias vivir en un ambiente sano, sin contaminantes y propuestas de acción por parte de estas para la mejora del río, no sólo desde ellas y ellos, sino también desde las autoridades.
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Todo esto ilustrado por el alumnado de primer, segundo, tercer y sexto grado de primaria de esta institución que con los testimonios de sus abuelos pudieron recolectar gráficamente la belleza que existía en el río.
Esta instalación pretende llevarse a otros 27 localidades tlaxcaltecas, con el fin de que más niños y niñas integren a su formación primaria la consciencia y el cuidado del medio ambiente que les rodea, a su vez dando a conocer lo que este río significaba en el pasado para sus abuelos y abuelas.
Las comunidades a las que irá este museo itinerante son:
- San Mateo Allende
- Tepetitla de Lardizábal
- Villa Alta
- Michac
- Santa Apolonia Teacalco
- Huactzinco
- Zacatelco
- Xicohtzinco
- Panzacola
- Tenancingo
- San Pablo del Monte (dos lugares)
- San Marcos Contla
- Ayometla
- Teolocholco
- Tetlanohcan
- Acuamanala
- Chiautempan
- Apetatitlán
- Contla
- Amajac
- Santa Cruz Tlaxcala
- San José Tlaxcala
- Totolac
- Tenango
- San Mateo Huexoyucan
[…] Paloma Fernández / Manatí […]