¿Viste el video de un semáforo en Monterrey derretido? En realidad eso no lo provocó el calor; aquí te explicamos.
Por Michell García | @Verificado_MX
En redes sociales se viralizó un video de un semáforo que supuestamente fue derretido por las altas temperaturas reportadas en Monterrey, Nuevo León.
Pero esto es falso, pues el semáforo se derritió por el incendio de un auto en la misma ubicación. Además, la temperatura ambiental tendría que ser ocho veces mas alta para derretir este tipo de dispositivos de control de tráfico.
Alarman altas temperaturas
El cambio climático derivado de problemáticas como la deforestación, la explotación natural y la contaminación generalizada han provocado temperaturas extremas a nivel global y en varias partes de México.
Durante la semana del 5 al 11 de mayo, Monterrey fue una de las entidades que superó los 45 grados Celsius, situación que alarmó a la población y dio pie a que en redes sociales se replicara un video en el que se observa un semáforo derretido supuestamente por el intenso calor en el municipio.
El video que ya fue compartido más de 90 mil veces en Tik Tok acumula cerca de 1.3 millones de me gusta y más de 18.2 mil comentarios.
Sin embargo, el semáforo no se derritió por las condiciones climáticas, sino por un incendio de un vehículo en el mismo punto.
Qué pasó con el semáforo
El video del señalamiento vial fundido, en realidad fue grabado un día después del incendio de un auto ocurrido en Monterrey en el cruce de las avenidas Rogelio Cantú y Anillo Períferico. Según Protección Civil Monterrey, el incendio comenzó en cuestión de segundos por una falla mecánica del auto y no hubo personas lesionadas.
De igual forma, es importante aclarar que las temperaturas de Monterrey no han sido lo suficientemente altas como para derretir semáforos.
En la grabación podemos observar que se encuentra deshecha la visera que tienen los semáforos, las cuales regularmente están hechas de un material plástico llamado policarbonato.
El director de Protección Civil de Monterrey, Fernando Fernández confirmó en entrevista que la visera del semáforo fue consumida por la transferencia de calor por radiación térmica del incendio de un vehículo tipo Sedán.
Fernández también aclaró que el señalamiento no pudo haber sido derretido por las altas temperaturas que se presentaron en la entidad ya que el punto de ignición del policarbonato es arriba de los 400 grados Celsius.
Otro dato proporcionado por Protección Civil Monterrey es que la temperatura requerida para que un vehículo se incendie es considerablemente menor que la necesaria para derretir un semáforo por completo.
Un automóvil puede prenderse en llamas a temperaturas superiores a los 200 grados Celsius, mientras que el proceso de derretimiento del plástico utilizado en semáforos generalmente requiere temperaturas que superen los 400 grados Celsius.
En un incendio, la radiación térmica puede ser especialmente peligrosa porque puede afectar objetos a cierta distancia de la fuente de calor (en este caso, el incendio del vehículo) sin necesidad de contacto directo, lo que significa que incluso si un objeto no está en llamas, puede calentarse lo suficiente como para encenderse si está expuesto a una intensa radiación durante un período prolongado, tal como pasó con la visera del semáforo.
Cómo prevenir incendios de vehículos
Las altas temperaturas pueden perjudicar los sistemas mecánicos y eléctricos de los automóviles, lo cual incrementa el riesgo de averías y posibles incendios.
Por ello, es importante seguir las siguientes recomendaciones de Protección Civil para mantener los vehículos en óptimas condiciones durante el calor extremo:
- Busca estacionarte en sombra
- Da constante mantenimiento al vehículo
- Observa señales de sobrecalentamiento: el humo que se eleva del capó, la aguja del indicador de temperatura que se dispara hacia la zona roja, o incluso el olor a líquido refrigerante caliente.
- Evita transportar materiales inflamables
Esta nota fue publicada originalmente en Verificado; Manatí la retoma con previa autorización y con fines informativos.