Alisson, una bebé de menos de tres años, fue víctima de feminicidio hace un año; hasta ahora no se ha sentenciado a nadie por el crimen
GUADALUPE JUÁREZ | @LupJMendez
Fotografías: Daniel Chazari | @dannychazari
Alisson Gabriela tenía dos años y tres meses de edad cuando la asesinaron en donde se supone que tendría que estar segura, en su casa, y maltratada por quien debería de protegerla, su madre; también fue atacada por su padrastro, ambos siguen presos, pero no han sido sentenciados: el feminicidio sigue impune.
Ocurrió hace un año, cuando los niños dejaron de ir a la escuela por el confinamiento obligado por la pandemia.
El 24 de marzo de 2020, Alisson fue llevada al Hospital Universitario con signos de violencia física y sexual, por lo que el personal médico dio aviso a las autoridades.
Sus tres tías –quienes peleaban su custodia— habían documentado desde meses antes el maltrato que sufría la niña viviendo con su mamá y su padrastro, los vecinos veían cómo la pequeña era maltratada, pero las autoridades no hicieron nada a pesar de las denuncias y el grito de auxilio: “Es su mamá”, se limitaban a responder.
El 1 de abril Ana Daniela –la madre de la menor— y su pareja Víctor Hugo N, fueron aprehendidos, y días después fueron vinculados a proceso; ambos aseguraban que la pequeña había caído de la cama, versión que fue descartada, y terminaron acusados por feminicidio.
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Este miércoles 24 de marzo, a un año del crimen, asociaciones como el Centro de Análisis Formación e Iniciativa Social A.C (CAFIS), la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos (Ddeser Puebla), familiares de víctimas como Rocío Limón, madre de Paulina Camargo, entre otras colectivas, se manifestaron frente a la Fiscalía General del Estado (FGE) para pedir que el caso no quede impune.
Nataly Hernández, de CAFIS, exigió a las autoridades a actuar conforme a los estándares internacionales para anteponer la protección de los derechos humanos de víctimas y familiares para desempeñarse sin negligencias, ni omisiones, así como tampoco ni prejuicios contra las víctimas de feminicidios.
“Alison no provocó –como dicen por ahí—que fuera tocada de esa forma y que fuera arrebatada de su derecho de vida, que se apagara su sonrisa, ella podía haber sido mi nieta, una niña feliz y plena”, dijo Rocío Limón, quien urgió a las autoridades a darle celeridad a las investigaciones de feminicidios y desapariciones.
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La activista también reprochó el trato recibido de la FGE hacia los familiares de las víctimas, a quienes revictimizan.
En la manifestación colocaron una lona a la entrada de la FGE, en la 31 Oriente, y se dirigieron a la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia de Género contra las Mujeres, en la 2 Oriente, donde también colocaron una lona y flores en memoria de Alison.
La Fiscalía General del Estado emitió un posicionamiento en redes sociales donde dio por esclarecido el caso y se deslindó al asegurar que el proceso está en manos del Tribunal Superior de Justicia.