MARIO GALEANA | @MarioGaleana_
Puebla es una de las ocho entidades del país con menor índice de desarrollo democrático en México, debido a la baja calidad de las instituciones para lograr avances democráticos y a la mala gestión del gobierno para lograr mejores condiciones de desarrollo social, económico y humano.
Esto se desprende del Índice de Desarrollo Democrático de México (IDD-Mex), elaborado de manera conjunta por el INE, el Colegio de México, el Centro de Estudios Políticos y Sociales y la Fundación Konrad Adenauer.
El estado obtuvo una calificación de 3 mil 648 puntos en el índice, donde la mayor cantidad posible, obtenida por el estado de Yucatán, fue de 10 mil puntos.
De este modo, el desarrollo democrático en Puebla sólo fue ubicado por encima del registrado en las entidades de Guerrero, Morelos, Veracruz, Michoacán, Yucatán, Oaxaca y Estado de México.
Los principales déficits en el estado se ubican en las dimensiones de la democracia desde las instituciones, además de las pocas oportunidades sociales y económicas que los gobiernos han dispuesto para la ciudadanía.
El ranking destaca que en el estado persiste una alta noción de corrupción desde las instituciones y pocos mecanismos de transparencia para tratar de resarcirla, un dique en el desarrollo democrático del estado.
Pega a democracia violación a derechos humanos
El informe resalta, asimismo, que las violaciones a derechos humanos de las personas en Puebla son parte de los principales obstáculos para la democracia.
Entre estas se enlista las agresiones contra periodistas, que ubicaron a la entidad como la cuarta con más casos registrados entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2020.
Por otra parte, la alta incidencia de casos de violencia de género, “que muestra un problema estructural y cultural que afecta a las mujeres en casi todos los aspectos de su vida”, según el diagnóstico, es uno de los principales rubros que afectan el respeto a las libertades civiles.
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En Puebla también se destaca el bajo desarrollo en políticas de inclusión indígena y de género dentro del gobierno local, así como la medición de desempleo, pobreza, mortalidad infantil y gasto en salud pública.
Sumados, estos indicadores ubican a Puebla no sólo como una entidad con “mínimo” desarrollo de democracia social, sino como una de las tres entidades del país con el menor crecimiento en este rubro, junto con Tabasco y Chiapas.
Para contrarrestar el bajo desarrollo democrática en el estado, IDD-Mex propone a las autoridades del estado fortalecer el respeto de los derechos políticos y las libertades civiles, asegurar la equidad en la participación de las mujeres en los organismos de la democracia, “profundizar” la lucha contra la delincuencia común, la pobreza, la inequidad, entre otras.
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