Un estudio indica que en 16 meses de pandemia, 89.5% de las personas encuestadas dijeron haber sido víctimas de algún tipo de violencia psicológica y 33.5% dijo haber ejercido violencia física
STAFF MANATÍ | @Manatimx
El investigador Raúl Alcázar Olán, del Departamento de Ciencias de la Salud de la Universidad Iberoamericana Puebla, halló que el enojo en algún integrante de una familia era la principal causa al ejercer violencia familiar, ya sea psicológica o física.
El estudio comprende dos investigaciones el Enojo excesivo y violencia familiar: informe para maestros y padres de familia y Enojo excesivo y violencia familiar: hacia una propuesta de política pública en el estado de Puebla.
Para las investigaciones tomaron una muestra de 665 adultos, de los cuales, el 94.4% mujeres y 91.6% hombres reconocieron ejercer algún tipo de violencia psicológica hacia algún familiar durante los 16 meses de pandemia.
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Y en cambio, 89.5% de las personas encuestadas dijo haber sido víctima de violencia psicológica por parte de algún familiar enojado.
El 33.5% dijo haber ejercido violencia física, la mayoría de las veces hacia la pareja, pero también hacia los hijos.
“Si bien los gobiernos federal y estatal han realizado esfuerzos para combatir la violencia familiar, mediante programas que buscan remediar el problema o sancionarlo, no hay, o son pocas, las iniciativas para la prevención”, dijo el también integrante del Sistema Nacional de Investigadores Conacyt.
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Para el especialista el enojo excesivo, entre otros factores, fue el elemento que aumentó las reacciones violentas por parte de cada integrante de la familiar, por lo que consideró que el manejo emocional es necesario para disminuir los episodios de violencia.
Alcázar Olán remarcó que la violencia que se presentó durante el confinamiento, aunque de manera estadística es hacia las mujeres, es más recurrente en las relaciones de pareja en donde hombres y mujeres ejercen varios tipos de violencia.
De enero a julio de 2021, en Puebla se han registrado 5 mil 229 investigaciones por violencia familiar, lo que representa 5% menos de lo contabilizado el año pasado, cuando inició el confinamiento obligatorio y diversas actividades públicas se suspendieron.
