Una encuesta revela que las personas en Puebla tienen un estado de ánimo muy bajo. Viven con mal humor, preocupación, estrés, síntomas de depresión e insatisfacción con su vida. Y mucho tiene que ver la precariedad.
GUADALUPE JUÁREZ | PALOMA FERNÁNDEZ
@lupjmendez | @palomapen
Estar de mal humor, preocupadas o estresadas, cansadas o sin vitalidad, aburridas o sin interés, tristes y deprimidos. Esos fueron los estados emocionales que experimentaron las personas en Puebla por encima de las cosas positivas, según la primera Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado (EMBIARE) 2021 del Inegi.
El estudio ubica a Puebla como el segundo estado en el país cuya población adulta tiene´el peor estaddo de ánimo sólo por debajo de Tabasco.
El Inegi presenta este indicador de balance emocional en la encuesta con un valor que va de -10 a +10, y mientras a nivel nacional el promedio está en 5.07, en Puebla fue de 4.49, apenas 6 décimas arriba que el 4.43 de Tabasco.
En ese sentido, esta encuesta resalta que en gran parte el nivel anímico bajo corresponde a los altos índices de desempleo y precariedad económica en ciertos sectores. Esto, en general, recae en la incertidumbre o el desánimo que ocasiona no poder llevar sustento a sus hogares.
A esto se le suma que, según la encuesta, otro motivo de desaliento entre los encuestados es el tener que recurrir a préstamos para poder solventar el gasto corriente de sus hogares.
A nivel nacional, las personas que se han visto afectadas anímicamente porque saben que no podrán cubrir los gastos del mes que viene son del 43.4%, cifra que se acerca al 45.3% de las personas que sí podrán. El 11.3% de la población encuestada no lo sabe siquiera.
Más de un tercio de la población tuvo que verse en la necesidad de pedir prestado para llegar a ese próximo mes, lo que en conjunto con haber quedado desempleado o haber perdido algún negocio, afecta aún más que el saber si llegarán o no a final de mes.
Entre ansiedad y depresión
El estudio indica que 17% de la población en la entidad poblana tiene síntomas de depresión o la padece, por lo que se ubica en el lugar nueve en México con más casos.
Es decir, en Puebla dos de cada 10 personas sienten tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración.
El grupo de edad con más síntomas de depresión es el de 30 a 44 años al no quitarse la tristeza de encima, dificultad para concentrarse, aunque son los de 18 a 29 años quienes refieren no disfrutar de la vida.
Por otra parte, poco más de la mitad de la población en Puebla padece ansiedad, pues se sienten nerviosos, intranquilos o con los nervios de punta, además de no dejar de preocuparse o no poder controlar su preocupación.
Que la mayoría de los poblanos hayan respondido que en las últimas dos semanas antes de aplicarse la encuesta se sentía así, convierte a Puebla en la entidad con mayor cantidad de habitantes con ansiedad, con un 57.8%.
Insatisfacción con la vida
La entidad poblana también ocupó el segundo lugar con el peor promedio de satisfacción con la vida de su población, con 8.16 de 10 puntos.
La población adulta en Puebla se siente insatisfecha con sus propias metas y logros alcanzados, así como con su vida familiar, su libertad para decidir, su vivienda y con la actividad a la que se dedican.
La encuesta indica que la población de entre 49 y 59 años de edad son quienes se sienten más insatisfechos con la vida.
En contraste, son las personas entre 18 a 29 años de edad los que más satisfechos están con su estilo de vida y relaciones.
Las personas ciegas y sordas en Puebla son los que presentan cero puntos en satisfacción con la vida, de acuerdo con la EMBIARE. Mientras que las personas con dificultades para caminar, subir o bajar tiene un puntaje de satisfacción de 8.7, por encima del promedio estatal.
¿El estado de ánimo en Puebla está marcado por cuestiones de género?
En cuanto a aspectos de la vida personal, se resalta que la contención emocional es uno de los rubros que más cojea entre géneros. Las mujeres, a pesar de ser las que más demuestran su afecto, según la encuesta, son también las más afectadas por la depresión, la ansiedad, la violencia física y el disgusto de sus relaciones amorosas.
El 15.4% de la población mexicana padece de depresión. De tal porcentaje sabemos que el 19.5% son mujeres y el 10.7% son hombres.
Sobre la ansiedad, 19.3% de las personas la padecen. La mayoría siguen siendo mujeres, con el 23.2% de la cifra total, en comparación con el 15% de los hombres.
Sobre las relaciones de pareja, las mujeres siguen destacando en los niveles de insatisfacción. Del 8.9% del total encuestado que no se siente conforme con su relación de pareja, la población femenina compete el 11.3%, mientras que la masculina solo el 6.4%.
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Otros aspectos donde hay una disparidad de género contundente, son aquellas personas que adjudican su insatisfacción con la vida a causa de violencia física, de las cuales las mujeres documentan las cifras más elevadas.
El 10.5% declara haber sufrido una agresión física los últimos 12 meses. De este porcentaje, el 4.50% declaró no saber quién es la persona que les agredió, 3.88% declaran conocerle y el 3.35% sufren de esta violencia por parte de alguien con quien viven.
En cuanto a las personas que no conocen quién les agredió, los hombres son mayoría con 2.54% del porcentaje. En los últimos dos rubros, en los que las víctimas conocen o viven con los agresores, las mujeres dan las cifras altas con 2.30% y 2.13% respectivamente.
Estas personas son directamente afectadas en su percepción de satisfacción con la vida y su balance anímico, que les deja en los niveles más bajos de ambos rubros.