La organización Códice localizó 31 punto de venta de cigarros electrónicos o vapeadores en Puebla, a pesar de que el gobierno federal prohibió su importación y comercialización en el país
GUADALUPE JUÁREZ | @lupjmendez
Desde un local en una de las plazas comerciales más lujosas de la cudad como Angelópolis, hasta en un puesto informal afuera de un antro ,son los lugares en los que la organización Códice encontró que se venden cigarros electrónicos o vapeadores en Puebla, a pesar de estar prohibido.
Brahim Zamora, representante de Códice Puebla presentó en conferencia de prensa un estudio que llevaron a cabo en cinco ciudades del país; en Puebla revisaron 73 lugares y en 31 detectaron la venta ilegal de estos dispositivos.
Para ello, simularon que eran consumidores, por ejemplo, en el centro comercial de Angelópolis hallaron este producto en un quiosco, el cual les fue mostrado de manera discrecional, ya que vendían otras cosas y los cigarros electrónicos no estaban a la vista.
También encontraron la venta de vapeadores en La Fayuca, así como en tiendas de ropa, establecimientos de comida para perros y en centros de distribución para mercancía al mayoreo.
En la revisión encontraron que los cigarros electrónicos están al alcance de niños, niñas y jóvenes sin ninguna restricción, además que hay carteles publicitarios en lugares donde no se ocultan su venta; algunos, inclusive, realizan entregas a domicilio.
En un recorrido en la zona de antros de Puebla y Cholula, como Angelópolis y la avenida Juárez, encontraron a comerciantes que usualmente venden cigarros, chicles y dulces, quienes también comercializan los cigarros electrónicos desechables desde 150 pesos.
Por su parte, Óscar Medina, otro de los integrantes de Códice, alertó que los cigarros electrónicos están cerca de primarias, secundarias y preparatorias, al alcance de infancias y adolescentes, quienes son los más propensos a consumirlos.
Acusó que esto es parte de la normalización en su consumo, lo cual ha sido auspiciado por la industria tabacalera, que impulsa el discurso de que no es dañino, aunque esté comprobado científicamente los efectos de fumar las sustancias que contienen.
Según el gobierno de México, además de la nicotina, los cigarrillos electrónicos pueden contener “ingredientes potencialmente dañinos, que incluyen:
partículas ultrafinas que pueden inhalarse profundamente en los pulmones; aromatizantes como el diacetil, un químico relacionado con una enfermedad pulmonar grave; compuestos orgánicos volátiles, y metales pesados, como níquel, estaño y plomo”.
Brahim Zamora abundó que incluso ha encontrado que en universidades privadas los consumen, a pesar de ser espacios libres de humo, como lo establece la ley antitabaco.
Códice se ha acercado a las autoridades sanitarias para informarles de los resultados de su informe, y trabajar en conjunto con posibles soluciones, al considerar que falta regular las normativas tanto estatales como municipales al respecto.
