Los presos de cinco cárceles federales podrán elegir a los 500 diputados federales en las elecciones de junio de 2021 en México.
STAFF MANATÍ | @Manatimx
Las personas privadas de su libertad en cinco Centros Federales de Reinserción Social (Ceferesos) que no han sido sentenciadas podrán votar en las elecciones de junio de 2021 para elegir a los próximos 500 diputados federales.
El Instituto Nacional Electoral (INE) ha inicado una prueba piloto para el voto de los reos que se encuentran en prisión preventiva en las cárceles federales varoniles de Sonora, Guanajuato, Chiapas, Michoacán, y la femenil de Morelos.
El voto de las personas privadas de su libertad es posible debido a que la prisión preventiva no elimina su presunción de inocencia en tanto no sean declaradas culpables o inocentes de los delitos por los cuales fueron detenidas.
Quizá te interese: Voces de mujeres en la cárcel más grande de Puebla
Esto implica que sus derechos políticos deberían estar intactos, como ocurre en otros países, tales como Argentina, Costa Rica, Colombia, España o Canadá.
En México, cuatro de cada 10 personas privadas de su libertad no han recibido sentencia, según el Inegi, pero esta proporción es más alta en algunos estados. En Puebla, por ejemplo, dos de cada tres reclusas se encuentran en prisión preventiva, sin sentencia.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) se manifestó a favor de la primera prueba piloto, pues es clave para reconocer a las personas privadas de la libertad como parte de la sociedad, independientemente de su situación jurídica.
Esto puede interesarte: Uno de cada 10 reos en cárceles de Puebla muere por Covid-19
A través de un comunicado, la CNDH añadió que la base medular de la prisión es la reinserción social y, por lo tanto, el derecho al voto es una manera tangible de lograr un sentido de pertenencia y de responsabilidad con la sociedad.
La comisión conminó a las autoridades mexicanas a que, de manera progresiva, el derecho al voto sea accesible en todos los centros penitenciarios del país, además de garantizar un clima de seguridad y secrecía en aos cárceles federales que resultaron elegidas para la prueba.
Además, reiteró que para que las personas privadas de la libertad conozcan a las candidatas y candidatos y sus propuestas, y así puedan ejercer su derecho al voto de manera informada, deben contar con información por todos los medios permitidos, de manera accesible y traducida a lenguas indígenas.