En nuestra columna invitada, Daniela Angelica Cordero Torres analiza el contenido de algunas de las canciones de 31 Minutos, la popular serie de televisión infantil y banda musical chilena.

DANIELA ANGELICA CORDERO TORRES | @Dany_TorresC

Los programas infantiles son parte esencial en el desarrollo de los niños. al formar parte de los medios de comunicación masiva participan en la educación dentro de la sociedad y principalmente en la sociedad mexicana.

Dentro de la programación infantil en la televisión abierta encontramos contenido que suele ser adultocentrista o incluir lenguaje y actitudes violentas disfrazadas de entretenimiento, lo cual repercute en el comportamiento, educación y formación de los niños y adultos que los consuman (cabe destacar que no en su totalidad). Y esta situación no ha cambiado por lo menos durante el tiempo que ha sido emitido 31 minutos, un programa para niños chileno que desde 2003 ha demostrado cómo se puede crear contenido de calidad, responsable con las infancias y en general con sus espectadores.

Lo cual no evita que también sea atractiva para los adultos, al contrario, cuenta con un humor irreverente y con una perspectiva critica, que muchas ocasiones no veríamos en la televisión, pero nos es presentada de una forma tan hábil e inteligente que cualquiera que lo vea aprenderá algo de ella.

Es por eso que las canciones del programa se han vuelto un éxito y no solo por el ranking top si no por lo que nos quieren expresar. Y es que seas niño o adulto son llamativas y promueven el análisis, la reflexión, la salud emocional, el empoderamiento, los derechos humanos y la curiosidad, además de tener ritmos llamativos y pegajosos.

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En el canal oficial de 31 minutos en YouTube, con 1.46 M de suscriptores y 766 videos —entre ellos episodios, colaboraciones clips y videos musicales—, encontramos la lista de reproducción de 47 canciones con su respectivo video y en cada una de ellas encontraremos una historia o mensaje que intentaré describir. Cabe aclarar que la interpretación de las canciones puede depender del contexto o del momento.

Las canciones de 31 minutos nos cuentan historias completas, por ejemplo, con Son pololos de Corchetis podemos ver una historia “romántica” pero eso no es lo más llamativo, sino que en el video podemos ver que en clase aprendían de educación sexual; podemos ver imágenes acerca de los aparatos reproductores, tanto masculinos como femeninos, imágenes que no podríamos ver en televisión abierta o en horario de niños comúnmente, pero están tan bien integradas al video que lo vemos como lo que son sin intentar ser morboso.

Por otro lado, tenemos canciones con títulos increíblemente creativos como Mi mamá me lo teje todo de Lino y Lana o Pepe Lota con la canción Devuélvame la pelota o si no, no sé lo que haré; podemos encontrar la importancia de la compañía en el desarrollo de los niños y de la actividad física y la convivencia con adultos mayores.

Además de Cápara Sonia con Mundo interior que, además de contar con gran nombre, nos regala una gran frase de inclusión y diversidad: “la gente que está en mi condición cuenta con un gran mundo interior”. Nos muestra la importancia de nuestro mundo interior y es un recuerdo de que no debemos encajar en los estereotipos, además de que no debemos subestimar el mundo interior de los demás.

Una de mis canciones favoritas es Cucky con La señora interesante, en la cual nos hace darnos cuenta de la importancia de ser curiosos, de preguntarse constantemente, de tener ganas de aprender de todo aquello que nos interese y no en el típico aspecto académico y que también está bien no querer aprender algo nuevo todo el tiempo, pues con trabajo y tiempo se puede lograr ser una señora interesante.

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Otra canción que sigue un camino similar es la de Joe Pino & The maniaco depresivos con Yo opino, canción que nos hace recordar que tenemos una voz y, a través de un video lleno de imágenes de acontecimientos importantes, nos muestra lo críticos que podemos ser y que, como lo mencionan los intérpretes, ”opinar es necesario porque tengo inteligencia”.

También podemos ver lo importantes que son algunas situaciones para los niños, situaciones que pocas veces son valoradas por los adultos, por ejemplo, en Rin-Raja de Juan Tastico podemos escuchar cómo pequeñas acciones como tocar el timbre representan toda una disciplina para un niño y cómo eso le provoca emoción y le genera una gran satisfacción, caso similar al de Eustquio Renato con Amorrao en el que podemos ver lo áalidas que son las emociones para los niños, emociones que muchas veces son ignoradas por cuestiones adultocentrsitas.

Siguiendo esta línea, tenemos una canción que refleja una situación más común de lo que parece en México y ésta es el Huerfadrino de Percy Mamani, quien nos muestra como un niño sé se da cuenta de lo que sucede con su padrino al desaparecer y lo que siente ante la desaparición de éste en su vida.

Una de las canciones mas sonadas de 31 minutos es Bailan sin César, canción que lejos de tener un ritmo y letra llamativos a pesar de lo simple que pueda sonar nos da un gran mensaje respecto a lo que queremos en la vida,pues al igual que la canción de Michael Astudillo Jr, Nunca me he sacado un 7, hace una crítica a la importancia de aspectos y habilidades académicas; también nos muestra cómo pueden verse aplicadas las inteligencias múltiples y cómo no a todos nos hace feliz lo mismo, por ejemplo, Michael sólo quería por un moneda bailar y eso está bien pues el éxito no es económico.

A mi parecer una de las canciones más tristes de 31 minutos es el Dinosaurio Anacleto, del Dinosaurio Roberto, pues en ella descubrimos que la fama, el éxito o lo material no son todo. ¿Quién no se ha sentido como el Dinosaurio Anacleto?, extrañando incluso a los cavernícolas que lo querían cazar. Y si estamos cercanos a un aspecto emocional lo estaremos aun más al escuchar a John Quijada con Diente blanco no te vayas, que me hace pensar en el duelo que puede representar para un niño perder un diente y despedirse de él.

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Juan Pablo Sopa con Objeción denegada da a mi parecer uno de los mensajes mas importantes, pues a pesar de ser criticado y catalogado “como idiota por cómo habla” , él lo seguirá haciendo pues está en su derecho; el problema es que la gente no es buena. También podemos escuchar Minilolas, una canción con un claro mensaje: ser fuertes, bizarras y valientes; en él podemos escuchar y ver a un grupo de chicas reales, que viven su vida y no son indiferentes ante situaciones de injusticia o acoso.

Es impresionante la creatividad y la responsabilidad con la sociedad de los escritores y creadores de 31 minutos pues ante la situación actual de la pandemia no sólo realizaron promocionales en colaboración con importantes organizaciones. sino que también nos regalaron la canción que muchos necesitamos ante la incertidumbre de la pandemia; Corchetis interpreta a mi parecer una de las canciones más hermosas, Primavera, en la que nos podemos sentir escuchados y también nos transmite ese sentimiento de esperanza porque “tu abrazo bien vale la espera” , y mientras podemos aprender nuevas cosas o atrevernos a hacer algo nuevo.

Y es que el programa no sólo se enfoca en los seres humanos, sino en todos los seres vivos. Y uno de los mejores ejemplos es El perro Johnny en la que nos muestra una realidad muy triste pero también la esperanza de que siempre hay alguien bueno que te va a querer por lo que eres, independientemente del tamaño pues “esta perra vida no te puede ganar”.

Incluso 31 minutos nos muestra de una manera muy divertida la historia de un ser extraterrestre que venía al mundo con la intención de conquistarlo y encontró una divertida manera de hacerlo: C-Lurio & Área 31 con Ritmo sideral nos muestran la importancia de la música y la responsabilidad que conlleva conquistar los movimientos de quienes la escuchan.

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Dentro de las canciones con mensajes más crudos encontramos Ríe de Cucho Lambretta pues el inicio es cruel pero real y lo que podemos hacer ante este mundo tan cruel es reír (aunque es importante saber y reconocer que no siempre se puede reír, también es muy válido llorar) por lo que definiría a la canción como divertidamente optimista.

Otra de las canciones con un video que podría dar miedo es Parque de diversiones de Milton Ludovico pues nos muestra que puedes tener todo pero aun así sentirte triste y que además no sirve tenerlo todo sin tener con quien compartir esa felicidad; como también sucede con Gary González y Mi castillo de blanca arena con vista al mar, en el que también se toca el tema de la perdida y el hecho de que comenzar de nuevo está bien y mejor si estas con amigos.

También encontramos canciones cuya letra personalmente me causa mucha confusión actualmente, como Mi Muñeca me habló; por otro lado, encontramos canciones especiales, por ejemplo, la de Patana y el resto con Navidad. una canción que busca responder a la pregunta que muchos nos hicimos de niños: ¿Por qué santa Claus no me trajo lo que pedí? Pero nos responde con una gran frase: “Todos los regalos valen cuando es Navidad” .

Por último, tenemos a Lucía La sandia de Pe & Pa, una canción en la cual me sigo preguntando cómo se puede convertir a una sandía en toda una estrella; Romeo y Julieta con Canción de amor, nos muestran cómo llevar un clásico a los niños de manera atractiva.

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Es importante que esta es mi interpretación de los mensajes que nos traen las canciones de 31 minutos y que no existe uno solo, sino que se presta a que cada uno tenga una opinión respecto a ellas basándose en lo que pudo notar, en lo que escuchó y el momento en que lo escuchó.

Puede que te parezca que es mala, pero como dice la canción de Guaripolo: “Es mala, pero es mía”. Y espero que sea un recordatorio de la atención que tenemos que poner a lo que escuchamos y a lo que consumimos, además que siempre estemos dispuestos a atrevernos, expresar, a opinar y a defender la regla primordial: “Nunca hacemos algo que no nos parezca original”.

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Daniela Angélica Cordero Torres
Psicóloga en proceso de titulación, feminista en permanente proceso de deconstrucción, tallerista;interesada en la cultura, las artes, la psicología social, estudios de género, tecnología y medios