La Fiscalía de Puebla entregó un plan de trabajo incompleto para investigar el posible feminicidio de Zyanya Figueroa, en el que relega la participación de asesores legales y se niega a que otras fiscalías intervengan.
GUADALUPE JUÁREZ | @lupjmendez
Patricia Becerril y Martín Figueroa, padres de Zyanya, tenían la esperanza de que este jueves la Fiscalía General de Puebla trazara la ruta de cómo llegaría a la verdad de lo que pasó con su hija ese 15 de mayo de 2018, cuando fue encontrada sin vida en su departamento.
Pero no ha sido así. Diez mesas de trabajo y una última reunión con personal de la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Género los llevó a una nueva decepción: el plan que les proponen para esclarecer la muerte está incompleto.
En febrero pasado, un juez ordenó reiniciar completamente la investigación sobre el caso. Pero esto no ha sido cumplido: el plan para poder hacerlo sólo incluye propuestas de los asesores legales de la familia de Zyanya, en tanto que las autoridades han obstaculizado las tareas que los llevarían a esclarecer su muerte.
“Nosotros tenemos la certeza de que no fue un suicidio, hay elementos. Pero aquí están cerrados a que se lleven a cabo. Entonces, nos vamos a mantener firmes, pero espero tener fuerzas, porque si no ¿a quién vamos a recurrir?”, acusó Patricia Becerril.
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Carlos Olvera, asesor legal del Observatorio Ciudadano Nacional de Feminicidio (OCNF) señaló que entre las propuestas de la Fiscalía se encuentra el traer a peritos externos, cuando lo que la familia solicitó fue una investigación en conjunto en la que pudieran intervenir la Fiscalía General de la República (FGR).
Será el 3 de mayo cuando la Fiscalía acuda ante el juez local para entregar el plan de trabajo que presentaron hoy a la familia, sin que cumpla –afirman— con lo mínimo para esclarecer la muerte de Zyanya.
La familia y el asesor legal reprocharon a la fiscal de género, Raquel Avendaño, no haber acudido a ninguna de las mesas de trabajo y luego no aprobar los acuerdos a los que ya habían llegado, por lo que pidieron su renuncia.
“No está a la altura de lo que se necesita, entonces es una persona que debe ser removida, no somos el único caso en estas circunstancias, pero nos mantienen en ese nivel hasta agotarnos para que nos rindamos y el caso se cierra. En el caso de mi hija, no va a ser así. Que no nos hagan mendigar justicia, no es lo que nos merecemos como familia”, lanzó la madre de Zyanya.
Zyanya falleció hace casi cuatro años, cuando tenía 26 años de edad y fue encontrada muerta en su casa en un fraccionamiento en inmediaciones del Hospital del Niño Poblano, donde hacía su residencia como médico.
A sus padres les dijeron que se había suicidado, aunque ellos detectaron que en la carta póstuma que supuestamente fue escrita por Zyanya y que se filtró a la prensa, las palabras no correspondían a su personalidad.
Después, un peritaje en grafoscopía arrojó que el documento era una falsificación por imitación, lo que significó una nueva travesía al darse cuenta de diversas anomalías en la investigación que había hecho la Fiscalía.
Investigación por agresiones, congelada
Por otra parte, comentaron que la investigación contra servidores públicos por haberlos agredido en mayo de 2021 durante una manifestación en la sede principal de la Fiscalía General del Estado, sigue sin avances. Esto, ya que hay víctimas que son de Ciudad de México y no podían viajar a Puebla para las entrevistas.
“Los funcionarios que nos rociaron con gas, siguen ahí, trabajan normal”, lamentó Carlos Olvera, quien explicó que las autoridades poblanas se negaron a hacer los trámites a distancia.
