En lo que va del año se han documentado por lo menos nueve probables casos de abuso policial en Puebla; en dos de estos casos las personas detenidas fallecieron en condiciones que, al menos públicamente, las autoridades no han esclarecido.
PALOMA FERNÁNDEZ/ @Palomapen
Detenciones arbitrarias, o con uso excesivo de la fuerza, y homicidios ocurridos en separos: esa es la sombra de la sombra del abuso policial en Puebla. Una que se extiende tanto por el estado como por los municipios.
El último caso registrado de manera oficial se cometió en la comandancia municipal de Huejotzingo, con lo que suman por lo menos ocho casos documentados en lo que va del año.
La denuncia por abuso policial en la comandancia de Huejotzingo fue documentada en la recomendación 20/2021 que la Comisión de Derechos Humanos de Puebla dirigió al ayuntamiento. La recomendación relata que un detenido de 20 años falleció por negligencia del personal de policías, al no brindarle atención médica cuando se sentía mal en los separos.
Sucedió el miércoles 6 de enero de 2021, cuando dos policías municipales de Huejotzingo detuvieron a un joven de 20 años tras una denuncia por alteración del orden público, por lo que fue detenido en el Panteón Juárez, acusado de agredir a personas.
El informe policial destaca que estaba intoxicado, lo detuvieron, lo llevaron a la comandancia. Un testigo afirmó que vio cómo el hombre convalecía, temblaba y se quejaba, pese a los síntomas, los agentes no llamaron a un doctor y falleció ahí mismo.
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La CDH determinó que los elementos policiales fueron negligentes, por lo que pidió al gobierno municipal de Huejotzingo sancionar a los responsables, sensibilizar al personal de la comisaria en derechos humanos y evitar que se vuelvan a repetir hechos similares.
También solicitó que se brinde atención psicológica a los familiares del fallecido, además de hacer reparación integral del daño.
Un recuento sobre el abuso policial en Puebla
Juan Carlos tenía 30 años, era egresado de la Escuela de Artes Plásticas y Audiovisuales (ARPA) de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). El sábado 12 de junio fue detenido con uso excesivo de fuerza por supuesta alteración del orden público en el municipio de Xoxtla y falleció en los separos por traumatismo craneoencefálico.
Los familiares de Juan Carlos, amigos y comunidad universitaria de ARPA siguen en busca de justicia para el joven. Hasta el momento, se reportó la detención de 11 agentes responsables de la agresión.
Sin embargo, el primer caso del año en curso fue el de domingo 3 de enero, cuando se difundió en redes sociales la detención de un joven que no llevaba cubrebocas. En el video se observan seis policías que hacen uso excesivo de la fuerza al aprehenderlo.
El jueves 21 de enero, se presentó otro caso en Coronango, cuando policías municipales sometieron a una mujer en la vía pública, quien acusó que no había accedido a un soborno que le pidieron los uniformados.
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El martes 9 de marzo, dos menores de edad fueron detenidos cuando jugaban futbol en la unidad habitacional El Fresnillo en Teziutlán; las personas que grababan aseguraban que un policía municipal lo ahorcaba, mientras lo sometía.
El martes 13 de abril, un grupo de policías municipales de Puebla fueron grabados mientras cacheteaban a una persona en estado de ebriedad; los elementos fueron cesados.
El viernes 30 de abril, en San Xiutelco, policías detuvieron a una persona tras un percance vial, aunque ya estaban en Veracruz.
Un caso más se presentó en el Hospital de Traumatología en Puebla, un enfermero fue detenido por elementos de vialidad, ya que se encontraba en doble fila. Los elementos lo sometieron, mientras la persona se sacudía, acusando que era lastimado.
Finalmente, el 28 de julio pasado la columnista Estefanía Veloz, una popular partidaria del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, denunció que policías estatales trataron de extorsionarla bajo la de “llevarlas a pasear” si no entregaban dinero.
Por la mañana siguiente, el gobernador Miguel Barbosa dijo que la actuación de los policías había sido “una gran vergüenza”, por lo que habían sido presentados al ministerio público.